Entendemos por mejora o refuerzo del terreno el incremento de sus propiedades resistentes o de rigidez para apoyar adecuadamente, cimentaciones, carreteras, o servicios. Antes de resolver o decidir por la dirección facultativa cualquier tipo o mejora del terreno deben realizarse los oportunos estudios geotécnicos.
En este caso se ha trabajado para el apoyo de una losa de cimentación, previamente se ha excavado y preparado la superficie de apoyo del relleno mediante máquina excavadora eliminando la capa de tierra vegetal, hasta llegar a la cota que indica el proyecto técnico.
Seguidamente el extendido de las tongadas de 30 cm. del suelo de préstamo en general y salvo especificaciones en contra del proyecto o de la dirección facultativa será de treinta centímetros, en todo caso el espesor de tongada ha de ser superior a tres medios (3/2) del tamaño máximo del material a utilizar.
Hay que tener muy en cuenta la humectación adecuada de puesta en obra. La humedad inmediatamente después de la compactación será tal que el grado de saturación en ese instante se encuentre comprendido entre los valores del grado de saturación correspondientes, en el ensayo próctor de referencia, a humedades de menos de dos por ciento (-2%) y de más de uno por ciento (+1%) de la óptima de dicho ensayo próctor de referencia.
Y una vez conseguida la humectación adecuada, se procederá a la compactación mecánica mediante un vibro-compactador de rodillo,
Repitiendo el proceso en cada tongada, hasta conseguir el resultado definitivo.
Aquí mostramos un vídeo de un relleno y compactado de una obra situada en Estepona, realizado por nuestra empresa obrávia de movimientos de tierra:
